Culiacán, Sinaloa.- El Movimiento Democrático Universitario condenó el incumplimiento de la UAS al convenio de movilidad estudiantil, al no pagar las becas a 33 estudiantes extranjeros en los plazos establecidos pues desprestigia a la Casa Rosalina.
El representante del MDU, Arturo Nevárez indicó que las autoridades universitarias han incurrido en la desatención en el convenio estudiantil establecido con otras universidades extranjeras, situación que no solo afecta a los estudiantes implicados, también a la reputación de la 'Casa Rosalina'.
"Es inadmisible que una universidad de prestigio descuide sus obligaciones hacia aquellos que buscan en ella una oportunidad de crecimiento personal", lamentó.
En dicho convenio, a cada estudiante se le proporciona una beca de 25 mil pesos mensuales, distribuidos en los cinco meses de movilidad, recibiendo 5 mil pesos mensuales, pero desde hace tres meses no reciben un solo peso.
Esta situación de inestabilidad económica hacia los jóvenes que venían con expectativas de tener una experiencia educativa enriquecedora en el estado, les ha generado estrés, impotencia, ansiedad, frustración e incertidumbre, al no tener para cubrir los gastos elementales como la renta de los arrendamientos y comida.
Subrayó que algunos estudiantes han tenido que verse forzados a trabajar en la informalidad para cubrir los gastos que la universidad es responsable de sufragar.
Arturo Nevárez indicó que se trata de 33 alumnos provenientes de Bolivia, Argentina, Colombia, Brasil y Perú, distribuidos en la Facultad de Contaduría y Administración (FCA), psicología, agronomía, entre otras, y quienes han notificado de esta situación a sus universidades de origen.
"Al parecer ya hay 3 universidades extranjeras, UTEPSA de Bolivia, Universidad Santo Tomas de Colombia y UFRR de Brasil, que están valorando no renovar los convenios".
Como maestro de la Facultad de Psicología, refirió que no es la primera vez que ocurre esta situación, pero sí en hacerse público.
Agregó que los alumnos de movilidad le expresaron sentirse decepcionados por la calidad educativa de la institución, por un constante ausentismo por parte de los profesores.
Solicitó al encargado de Despacho de la UAS una rápida solución a esta problemática, quien al ser cuestionado sobre la situación declaró no tener conocimiento, pero una vez que se enteró, dio instrucciones para que les fueran pagadas las becas adeudadas.